El forcado
es un mozo que participa en una suerte típica de las corridas de
toros portuguesas.
Los
forcados, son grupos amadores, es decir aficionados ya que no cobran por su
actuación, son varios hombres que en una corrida de toros "pegan" el
toro. Cuando se ejecuta una pega, ocho hombres entran al ruedo, y su tarea o
suerte es inmovilizar al toro, para después soltarlo, quedando solo el
rabillador quien remata la suerte haciendo que el toro se mueva en círculos, el
primero es el forcado de cara; los otros siete lo ayudan a inmovilizar al toro,
habiendo uno (el rabillador) que asegura el rabo del toro, para intentar
frenarlo, desestabilizándolo, para que al ser consumada la pega, sus compañeros
puedan soltarlo (dar salida) sin ser embestidos por este; la formación es la
siguiente: un forcado de cara, un primera ayuda, dos segundas ayudas, un
rabillador y tres terceras ayudas.
La pega, únicamente consiste en
inmovilizar al toro, con el forcado de cara agarrado de la parte frontal de la
cabeza del toro, es decir, entre los cuernos de este; si el forcado de cara
quedase fuera de los cuernos, el toro no se considera pegado, por lo que es
necesario volver a repetir la suerte.
El
origen de los forcados
En
1836 en Portugal, durante el reinado de Doña Maria II, fue decretada la
prohibición de la muerte de los toros en el ruedo, y para complemento de la
lidia de los cavaleiros (rejoneadores), se comenzó a pegar el toro.
Fue así que en siglo XIX tuvo
formalmente origen la existencia de los forcados como la conocemos el día de
hoy.
|
miércoles, 12 de diciembre de 2012
FORCADOS
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario